El teatro, el género teatral, agrupa obras que están escritas para ser representadas por unos actores.
Pudiendo ser en verso o en prosa, se distinguen tres tipos de obras dramáticas: tragedia, drama y comedia.
Elementos del texto teatral:
- Acción: se desarrolla a través de diálogos entre los personajes. El diálogo hace avanzar la trama y caracteriza la psicología de los personajes. Además de conversaciones, pueden producirse monólogos donde un personaje habla consigo mismo y apartes, en los que un personaje dice algo que se supone que solo escucha el público.
- Acotaciones: apuntes sobre el decorado, el tiempo o la actitud de algún personaje. HAbrá acotaciones externas, con información explícita ofrecida por el propio autor y acotaciones internas sobre la puesta en escena.
Estructura del texto teatral:
- Acto: apartados en los que se divide una obra teatral con un breve descanso entre ellos durante el que se baja el telón.
- Escena: fragmentos de cada acto, marcados por la entrada y salida de personajes.
La representación teatral
La representación teatral es el espectáculo en el que los actores, representando el papel de los personajes, ponen en escena ante el público un texto teatral.
Elementos de la representación
- Los actores y su interpretación
- Escenografía
- Dirección
Durante la representación se pone en escena el texto creado por un autor teatral, el cual se conoce como dramaturgo.
La tragedia
La tragedia es un tipo de obra teatral en la que los personajes luchan contra un destino adverso. La tragedia nace en la Grecia clásica a cargo de autores como Esquilo, Sófocles y Eurípides.
Los protagonistas, que fueron en principio dioses o personajes de elevada condición social, luchan contra un destino adverso y el final es trágico.
El drama
El drama es un tipo de obra teatral en el que se presentan problemas graves, pero con algunos elementos cómicos.
Los personajes son gentes del pueblo llano. Se enfrentan a conflictos serios para conmover al espectador, mezclados con los elementos cómicos. El final no es siempre trágico.
La comedia
La comedia es un subgénero teatral de carácter alegre que pretende provocar la risa del espectador.
Los personajes no son héroes, ni pertenecen a la nobleza, son enamorados, criados, señores, pícaros... con algún defecto o vicio.
Existe un conflicto debido a las obsesiones o defectos de los protagonistas. El desenlace es siempre feliz para todos, menos para quien ha causado el conflicto, a quien se suele poner en ridículo.
Otros subgéneros teatrales
- El entremés: pieza teatral breve de carácter cómico que trata un asunto popular y que originariamente se representaba en los intermedios de las obras principales.
- El sainete: pieza teatral breve, burlesca, en prosa o en verso, que refleja costumbres y lenguaje populares.
- Guiñol: espectáculo protagonizado por títeres.
Origen y evolución del teatro
El género teatral nace en la Grecia clásica (siglo V a. C.) donde surgen la tragedia y la comedia. La separación de ambos subgéneros era tajante y las obras debían respetar las tres unidades:
- Unidad de lugar: la acción se debía desarrollar en un único espacio.
- Unidad de tiempo: la historia no debía superar las 24 horas.
- Unidad de acción: la historia solo debía desarrollar un tema.
Posteriormente, el teatro romano imita al teatro griego y tuvo grandes autores como Plauto y Terencio en comedia y Séneca en tragedias. Con la implantación de la religión cristiana, tomando como origen los actos litúrgicos, se implantaría en Europa un teatro medieval con obras asociadas a las celebraciones religiosas. En España, estas obras se llamaron autos, breves piezas de un solo acto y argumento sagrado.
El teatro en el siglo XVII
El teatro español del siglo XVII rompió con la tradición grecolatina, rechazando las normas clásicas. Sus características son:
- Mezcla de lo trágico y lo cómico
- Rechazo de las tres unidades.
- El amor y el honor como temas principales.
- División en tres actos.
- Obras en verso.
El creador de esta fórmula dramática fue Lope de Vega, continuado y perfeccionado después por Calderón de la Barca. En Inglaterra con William Shakespeare y en Francia con Racine, Corneille y Moliere, hubo fenómenos similares, pero con diferencias respecto al teatro español.
El teatro posterior
Fundamentalmente en el siglo XX, el teatro ha experimentado profundas transformaciones que se alejan de las representaciones anteriores que van desde el teatro del absurdo que busca sorprender al espectador con situaciones sin sentido hasta el teatro del pánico que busca provocar. Además, la mímica, los gestos, las luces y otros efectos especiales, adquieren gran importancia.
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