Durante el primer tercio del siglo XX, el teatro español no participó de las innovaciones del teatro europeo y los críticos señalan que salvo las excepciones de Valle y Lorca, la calidad no es muy elevada. La producción cuenta con una línea destinada al gran público como teatro popular que triunfa en las taquillas y otro de superior valor literario de carácter minoritario.
Teatro popular
Se incluyen tres tendencias:
- Drama burgués: continuará el realismo del siglo XIX siendo su mayor exponente el premio Nobel Jacinto Benavente que destacará por obras como Los intereses creados.
- Teatro costumbrista: de raíz romántica, busca entretener al público sin más pretensiones. Se encuadran en él, los hermanos Álvarez Quintero, Carlos Arniches o Pedro Muñoz Seca, inventor del "astracán", un teatro para reír, cuya obra más destacada es La venganza de don Mendo.
- Drama en verso modernista, de ideología conservadora y que alude al pasado imperial español. Marquina y Villaespesa serán exponentes de esta tendencia.
Tendencias innovadoras
Teatro del 98 y Novecentismo
Tiene como máximo exponente a Ramón María del Valle-Inclán, aunque producirán también autores como Unamuno, Azorín o Gómez de la Serna. Valle evoluciona desde comedias modernistas hasta revolucionar el género con la creación del esperpento, un teatro que muestra una visión grotesca y deformada de la realidad para profundizar en la misma. La obra cumbre es Luces de bohemia donde se cuentan las andanzas del fracasado escritor Max Estrella por el Madrid más turbio y degradado con una gran variedad de personajes de escasos valores.
Teatro del 27
A los autores del grupo poético como Salinas o Alberti que también escribirán teatro, hay que añadir otros creadores como Max Aub o los renovadores del teatro humorístico que alcanzarán su plenitud tras la guerra civil, Jardiel Poncela y Miguel Mihura. Pero el referente principal de esta generación es Federico García Lorca con una obra variada, plena de elementos líricos y surrealistas a lo largo de tres etapas.
1. Etapa inicial. Durante los años 20, Lorca experimenta en cuanto a forma y temas que le llevan a hacer obras para guiñol como Títeres de cachiporra, al drama histórico en verso Mariana Pineda o su obra más importante de la etapa como La zapatera prodigiosa, mezcla de verso y prosa, donde anticipa elementos de su producción posterior.
2. Etapa vanguardista. Desarrollada en los primeros años de la década de los 30, de carácter surrealista, con El público y Así que pasen cinco años.
3. Etapa de plenitud. Entre los años 1933 y 1936, Lorca no solo consigue el reconocimiento de la crítica, sino también el éxito del público en España y Argentina. Lo hace con Bodas de Sangre (1933) y Yerma (1934) que formarían una probable "trilogía dramática de la tierra española" junto a una obra inacabada. Abordamos sus tres obras más importantes:
- En Bodas de Sangre, se aborda la vida y la muerte a partir del crimen de Níjar, en la provincia de Almería. Se consolidan algunos de los símbolos de las obras de Lorca como el puñal, el cuchillo y la navaja, como presagio de la muerte. La tragedia ofrece una visión del amor como sentimiento irrefrenable.
- Por su parte, Yerma gira en torno al instinto de una mujer por querer se madre, algo que no puede lograr.
- Se asocia a estas obras, La casa de Bernarda Alba (1936), que se distancia por su dimensión política y social. En la misma, Bernarda trata de imponer una vida estricta y de luto a sus cinco hijas, ante la amenaza del galán, Pepe el Romano. Para la madre, lo principal son las apariencias en el contexto de la España rural de la época.
Lorca hizo además un gran trabajo de difusión del teatro clásico español por todo el territorio al frente de la compañía de teatro universitario La Barraca.
de puta madre
ResponderEliminarQuiero preguntar, ¿con solo esto en el examen puedo sacar la pregunta de literatura perfecta? ¿O es solo un resumen del teatro y debo ampliarlo?
ResponderEliminarno
EliminarYo esto sí que lo daría por bueno. Un saludo.
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